¿Si hago de lo que me apasiona mi trabajo?
Mulieris hoy – 29 de septiembre de 2020 – ¡Quiero arriesgarme a hacer lo que me gusta! Trabajar en ello, vivir de ello. Prefiero lanzarme a intentarlo. Si fracaso, que sea intentándolo, no porque no hice lo posible.
Tal vez en este difícil tiempo de pandemia te quedaste sin trabajo. A mí me sucedió. Debido a la consecuente crisis económica que trajo la emergencia sanitaria del Covid-19, perdí mi empleo. Fue duro, llevaba allí casi 11 años: era un trabajo que me gustaba, al que le había puesto el corazón, y fue como si me lanzaran un baldado de agua fría encima.
¿Ahora qué hago? ¡Mi experiencia es demasiado específica! ¿Dónde conseguiré trabajo? ¿Qué voy a hacer con las deudas?, fueron algunas de las primeras preguntas que pasaron por mi cabeza tan pronto recibí el “golpe” de la noticia.
Llena de valor, me puse manos a la obra…
Buscar trabajo es todo un reto, pero me dije: ¡lo voy a conseguir! Mejoré mi perfil en LinkedIn, modifiqué mi Curriculum Vitae en contenido y apariencia, y comencé a aplicar a cuanta opción encontraba.
Pasados los días, llegó el desánimo: no tenía respuestas de las empresas, y si llegaban a responder, lo hacían para dar las gracias y decir que no continuaba en el proceso.
Luego reflexioné: ¿Por qué estás aplicando a esos trabajos?, ¿Sólo por la necesidad económica?, ¿Te imaginas feliz en ellos?, ¿Te apasiona lo que ofrecen?
La respuesta fue simple: no me veo trabajando para algo que no toca las fibras de mi ser, no veo un propósito. Si solo me muevo por la necesidad económica, creo que voy por mal camino.
¿Y si me dedico a lo que me apasiona?
Así que me propuse: ¿Y si me lanzo a trabajar en lo que realmente me gusta?, o, en otras palabras, ¿Y si me dedico a lo que me apasiona?
A veces por necesidad aceptamos empleos que no llenan nuestro corazón. Claro, esto es fácil decirlo en una frase, pero complicado de aplicar. Creo que es importante, al menos, trabajar con pasión, y hallar un propósito en lo que haces, realizarte como ser humano.
Juan Pablo II, hoy santo, en la Encíclica Laborem Exercens, sobre el Trabajo Humano, dijo al respecto:
“El trabajo es un bien del hombre —es un bien de su humanidad—, porque mediante el trabajo el hombre no sólo transforma la naturaleza adaptándola a las propias necesidades, sino que se realiza a sí mismo como hombre, es más, en un cierto sentido se hace más hombre”.
Trabajar con pasión, en lo que te apasiona, es darlo todo. Como lo señaló en algún momento Nelson Mandela:
“No encontrarás pasión alguna jugando al mínimo; conformándote con una vida menor a la que eres capaz de vivir”.
O como fue para Albert Einstein, a quien la pasión por lo que hacía lo llevó a grandes cosas. Un día dijo:
“No tengo ningún talento en especial. Sólo soy apasionadamente curioso”.
La clave puede estar en la compasión
Creo que el secreto para ser feliz con lo que haces, en tu trabajo, está en encontrar un propósito; y la clave puede estar en la compasión. Sí, parece un juego de palabras: la pasión por lo que haces, puede estar en la compasión. Esto es sentir pasión por el otro, tener empatía, deseo de servir, que tu labor vaya más allá de un beneficio personal.
Así como funciona el amor, así es trabajar apasionadamente. El amor se da, y en tu labor se manifiesta en el servicio a los otros. De esta manera —aunque parezca frase trillada— ¿De qué te sirve un trabajo sino es para servir, para cambiar algo en el mundo?
Yo ya me he lanzado a intentarlo. No sé a qué lugar me llevará, pero es allí donde, por ahora, quiero navegar. Me apasiona escribir, contar historias y que esas historias toquen corazones, den esperanza. Este artículo es un primer comienzo… Ya les contaré cómo me va.
Un Comentario
Sonia Williams
Bello mensaje que me toca mucho, yo también estoy en este proceso hacer lo que me gusta, no es fácil ir contra corriente pero de algo estoy segura que de la mano de Dios saldré adelante, aunq estoy en mis 50+ se que podré Gracias por tan bello mensaje y sigue adelante escribiendo historias a mi también me encanta leer